Morales Fernández, Sory Alexander2023-06-012023-06-012023-05-31http://repositorio.unimayor.edu.co/handle/20.500.14203/726En consecuencia, se requiere que la naturaleza de la ciudad deje de ser vista solo de manera instrumental, como una maquina construida y dispuesta para la dinámica mercantil, siendo necesario desde otras acepciones, abordarla para su estudio y gestión, como el producto de la interacción entre las colecciones de edificaciones vinculadas por el espacio y los sistemas humanos de actividad vinculados por la interacción (Hillier & Vaughan, 2007); de esta manera, las categorías sobre el espacio y los actores y/o agentes urbanos juegan un papel trascendental de cara a la exploración potencial de las actuaciones espaciales y culturales constitutivas en el interior de la ciudad; donde quizás, aprendamos en una posible “nueva sociedad” a concebir la ciudad como un escenario y posibilidad de los derechos humanos, aportando así, en la premisa que posiciona el territorio como un producto social. En correspondencia, con el arquitecto Juan Carlos Pérgolis (…) digamos que la ciudad que habitamos es “el territorio de los arraigos”.A raíz de la pandemia mundial del 2020 y como anhelo en “la era post covid-19”, se podría postular que social y universalmente ha tomado fuerza el reclamo colectivo por “el derecho a la ciudad”, concepción planteada y anticipada por el filósofo francés Henry Lefebvre (1968) hace 5 décadas, la cual persigue el derecho a una vida urbana transformada, conceptualmente bien definida, aludiendo sugerentemente al espacio urbano como un ambiente generoso, adecuado para el uso y disfrute de las personas.esDerecho a la ciudadDiseño urbanoEspacio públicoTerritorioGuía de curso